miércoles, septiembre 24, 2008

Historia de un camino (resumen)

llevo ya tres dias en casa y trás el reposo, que de poco me ha servido porque mis piernas siguen igual, al menos mi cabeza ha ido procesando lo que he pasado estos días.
Sin duda las vacaciones han sido perfectas porque he disfrutado de cada minuto de nuestro viaje como ya he dicho en el otro post.
Desde el dia que salimos de Santander (a las 3.30 am que tiene delito)y llegamos a Lugo, la cosa pintaba bien. Eramos libres en tierras extrañas y eso mola.
El primer día lo pasamos en Sarria porque nos aburrimos de Lugo enseguida asi que nos cojimos un bus y para allá.
Llegamos y buscamos un albergue. No pudimos elegir mejor. La alberguera un encanto, el sitio precioso y ahi conocimos a nuestros primeros compañeros de viaje. Una pareja de hermanos sevillanos (Macarena y Gerard) y a dos matrimonios salmantinos que fueron como nuestros guias.
Salimos el primer día hacia Portomarin con toda la ilusion del mundo pero a los 5 km mis botas me habian hecho unas rozaduras que me las tuve que kitar y continuar en chanclas. Ese día estuvo genial, sin un dolor, como de paseo y al llegar a Sarria pillamos sitio en el albergue municipal. Todo perfecto. Paseito por la tarde, cervecitas en el pueblo con nuestros amigos.
Al día siguiente madrugamos y nos encaminamos a Palas de Rei. Jornada tranquila aunque el camino fue el que menos me gusto porque mucho transcurria al lado de la carretera.
Llegamos a Palas y encontramos otra vez sitio en el albergue municipal. Una pasada, nuevo y bastante limpio.Quedaba un poco lejos del pueblo pero nos dio igual, despues de la ducha y ya fresquitas nos bajamos a tomar unas cerves con los colegas y hacer recados (super, farmacia y esas cosas)A mi a me empeza a molestar un poco la rodilla derecha.
Vuelta a madrugar. Este dia decidimos partir la etapa porque ha Melide era corta pero a Arzua era larga asi que iriamos a dormir a la aventura y lo fue.
Ya me dolia mucho la rodilla pero no importaba.
No ibamos a parar en Melide pero nos encontramos con nuestros amigos sevillanos y nos comimos una buena racion de pulpo asi que por la tarde ya y con el estomago lleno salimos de nuevo a andar.
Mi rodilla ya no me dejaba apenas doblarla y me dolia mucho asi que Inés, supongo que viendo mi careto, empezo ha hablarme sin parar para tenerme distraida pero al cabo de no se, unos 6km ya nopodia seguir asi que decidimos buscar donde quedarnos.
Llegamos a un pueblo que se llama Boente y alli habia un albergue asi que la dije, hoy no doy ni un paso más.
Nos intalamos alli, cuando llegamos solo habia un matrimonio de Alicante y dos chicos italianos pero tenian una reserva de tres y ahi llegaron Roberto, Alberto y Dani.
La mujer de Dios (la alberguera)nos preparo la cena (dejo mucho que desear) pero estuvo de lo más entretenida por estos habian parado a comer en Melide y el camarero de la pulperia le habia cambiado a Dani una camiseta por una botella de orujo de miel (mucho menos fuerte que el cantabro).Alli nos triscamos la botella entre brindis y vaciladas por la "estupenda" cena.
Despues de una fuerte discusión con "Dios" el alberguero y los alli presentes a cuenta de que eramos unos urbanitas pijos que no sabiamos atarnos unas botas a lo que Inés contesto con la elocuencia que la caracteriza, nos cruzamos al bar de Suso y ese fue el principio del fin (igual esto suena muy heavy)pero es lo que tienen los cuabatas a 2 euros y las medias a 1.
Como campeones resacosos todo el mundo se levanto a las 7 y empezamos a andar. La primera parada sirvio para el reparto de ibuprofenos y comer algo. Habia que superar la resaca. Lo hicisteis muy bien chicos.
El día paso andando hasta llegar al siguiente pueblo donde ibamos a quedarno(no me acuerdo el nombre) ¡ah sí, Pedrouzo!. Pillamos por los pelos en el albergue en el que ya estaban la gente que habiamos ido conociendo por el camino. Las Japos, el Maruja, lo guiris raros......
El día estuvo muy bien, ya no estabamos solas y pese a que el tiempo que lo habiamos estado estuvo bien, el tener otra gente con la que hablar y compartir era genial.
Ya era nuestra ultima etapa, mis rodillas me dolian mucho, las dos, y mi amiga iba como si no hubiese andado ni un minuto, la tia fuerte.
Ibamos charlando de todo, conociendonos porque al final todo es nuevo y a ratos calladitos pensando en nuestras cosas.
Una señora que me vio andar me puso unos vendajes como Nadal que me aliviaron bastante y poco a poco llegamos a Gozo y de ahi al Obradoiro.
No puedo explicar muy bien lo que senti, por un lado la alegria de haber llegado y por otro una enorme tristeza de que se acabase.
Tenemos nuestras compostelas, símbolo de todo lo vivido esos dias y tenemos más amigos que es lo que más vale porque estos dias han sido inolvidables

3 comentarios:

Anónimo dijo...

madre soy medio mongola, o entera. todo el rato pensando, ¿por qué lleva María un fonendoscopio colgado en el cuello? Santa trabada
un besito

Anónimo dijo...

Ya estoy de vuelta, buen resumen amiga, nos vemos en los bares pero con cerves 0.0 jeje
Irene

Anónimo dijo...

Ola, what's up amigos? :)
In first steps it is very nice if someone supports you, so hope to meet friendly and helpful people here. Let me know if I can help you.
Thanks and good luck everyone! ;)