martes, marzo 06, 2007

Homenaje a mi abuelo.

Aunque la fama de "Joselon" se extendió por todos los municipios del entorno de Peña Cabrga, debido a su larga permanencia en esas montañas y a la audacia de sus acciones, en Astillero tambien se recuerda mucho a otro emboscado cuya historia tuvo un final mucho menos trágico.Se llamaba José Secadas Salcines y era de Astillero y se emboscó en la vecina Asturias, donde se convirtió en una leyenda, posteriormente conocida y extendida a Astillero, a su regreso al municipio años después. Por lo visto José Secadas no tuvo problemas para reinsertarse y rehacer su vida, encontró trabajo de nuevo en los talleres de Astillero y, de años de absoluto silencio, pudo contar su historia a sus amigos y compañeros, uno de los cuales nos la relató de la siguiente manera.
"Aqui hubo otro emboscado, el Bastiano, José Secadas, tiene una historia de la órdiga que te habrán hablado en Astillero. Este hombre estuvo en la guerra, cuando entraron los nacionales se fue hacia la zona de Asturias, allí le quisieron fusilar a la puerta del cementerio, pero se les escapó, dio un salto, le dispararón pero no le dieron, debió de sr cuando se fue al monte.Fue famoso en los montes de Asturias, a mi me lo conto luego. Se quedo alli emboscado en el monte y era muy famoso. Se hacia pasar por tonton, así crgado de hombros, a veces se le olvidaba hablar....Se acerco a una casa que vivian dos mujeres que se llamaban las "Bastianas" y le vieron con hambre y les parecio medio tonto y alli se quedo como criado. Como era carromatero hizo un carro perfecto pintado y todo y por eso lo descubrieron. Vino el jefe de la falanje y volvio a escapar para despues entregarse a la guardia civil que le dijo ¿Tu que has hecho? ¡Tanta fama el Bastiano y resulta que nos has hecho nada! Pa casa.Volvió a Astillero entró a trabajar en los Astilleros y un día organizo una excursión con gentes de Astillero, alquilarón un autobus y fueron todos para allá. No me acuerdo del pueblo, era un pueblin de monte y este se paro con la vuelta del Bastiano.

El autor de este libro, apesar de vivir muy cerca de Astillero y llevar muchos años investigando la historia de los emboscados y la guerrilla de postguerra no habia tenido noticias del Bastiano hasta que realizo la entrevista anterior.
Puesto en contacto con la familia Secadas, en concreto con su viuda y sus hijas, reunió más información para redactar la siguiente reseña que sin duda constituye una de las historias más singulares de este libro.

José Secadas Salcines nación en Astillero, el Barrio de la Churruca el 4 de abril de 1914, era hijo de José Secadas Tijero y de Antonina Salcines , que era natural de Maliaño y falleció cuando Jos´´e solo tenia 4 años de edad. Entonces José y una de sus hermanas se fueron a vivir a Maliaño con su abuela materna y los otros dos hermanos se quedaron con su padre que se volvio casar con un viuda. Con 14 años ya trabajaba con su padre y aprendió el oficio de carromatero. Durante los años de la republica comenzo a interesarse por la politica, compartiendo con su padre inclinaciones de izquierdas. La guerra le sorprendió cumpliendo el sevicio militar en la zona que permaneció fiel a la Republica combatiendo hasta la caida del frente del Norte en octubre de 1937.
Fue entonces cuando José desapareción en Asturias y su familia quedo completamente deshecha, porque unos meses antes su hermano pequeño Eloy murio en el frente y su padre fue condenado a muerte por pertenecer las Consejo Municipal de Astillero en los últimos meses de la Republica. A este al final le perdonaron la vida pero paso 7 años en el Dueso muy enfermo de los bronquios, cambiando la poca comida que le llevaban sus hijas, por estar cerca de la ventana de la celda donde se acinaban los presos porque prefería el hambre a la asfixia. Cuando salio de la carcel no duró mucho, murió en Astillero de un ataque de asma en 1947.
Mientras tanto su hijo José permanecia desaparecido en Asturias. Encontro refugio en Porrua, un pueblo del Concejo de Llanes, donde las bastianas le dieron comida y le acogieron en su casa. En aquellos momento de la guerra, la situación no era facil para un soldado republicano de vuelta a casa, pues los falangistas vigilaban los rios de Cantabria para dar el paseillo a los que volvian y en caso de llegar a casa el panorama no era mejor, porque José sabia que la policia falangista se la tenía jurada y le mataría. Los moviles no eran politicos sino personales pues al policia le gustaba una prima de José con la que este se llevaba muy bien, y además José era muy guapo, lo que parece despertaba los celos del policia.
Por esto José se escondió en Porrua y opto por una estrategia de supervivencia que le salvo la vida: fingio ser tonto y dejo de hablar.
Las señoras se conmovieron de aquel muchacho y le tomaron como criado siendo pronto muy conocido por los vecinos de la zona. Así paso bastante tiempo mientras el policia y sus compañeros le buscaban sin exito por los campos de concentración de Asturias y su familia le daba por muerto.
Al cabo del tiempo cuando el "Bastiano " era muy conocido por todo el pueblo, aquel falso "tochu" se descubrió cuando arreglo un carro de las "Bastianas" con una habilidad asombrosa delatando su profesión de carromatero. Entonces fue detenido por la guardia civil que lo llevaron a fusilar al cementerio llanisco de Camplengu, de donde se consiguio escapar en el último momento soltandosé las ligaduras y arrojando su gabardina sobre los que iban a dispararle. A pesar de los tiros consigui escapar y huir al monte refugiandose en la Sierra de Cuera, zona extremadamente agreste y boscosa. Los vecinos de Porrua le conocian y le ayudaban, dándole refugio en sus cabañas y avisandole de los movimiento de la Guardia Civil.
El caso es que el "Bastiano" permaneció emboscado durante 3 largos años, hasta 1940. José Secadas no fue un guerrillero fue un superviviente solitario que encontró refugio en casa de las "Bastianas" y en la estrategia de hacerse pasar por tonto la mejor manera de eludir la represión y no le quedo más remedio que echarse al monte para salvar su vida.
Finalmente el "Bastiano" se entregó voluntariamente a las autoridades para poner fin a esa situación absurda, de manera que hablo con el alcalde pedaneo de Porrua para que intercediese por él y avisó a su familia de Astillero , que supo entonces que no estaba muerto.
Su hermana Sagrario y su cuñado acudieron a Llanes a reponder por el aunque fue detenido y mandado aun campo de concentración donde estubo hasta 1943. Vovió entonces a Santander, y entro a trabajar con su cuñado que era el dueño de la heladeria Regma, porque en Astillero el ambiente no era muy favorable par un excombatiente republicano. Sin embargo un día en el tren conoció a una chica de Pontejos, Pilar, y el 1 de junio de 1946 se casaron y se establecieron en Astillero. Al año siguiente tuvieron gemelas, aunque una de ellas murio a los pocos meses, y después le siguieron otra niña y tres niños. Una familia numerosa que habia que sacar adelante.
Pese a ser tachado como "rojo" consiguio trabajo enlos Astilleros como carpintero gracias a un falangista que lo ayudo.
Nunca más se le oyo hablar de politica en la calle ni en casa. Fue un padre ejemplar que solo se ocupo de su familia. Revelaba su parte más humana cuando un padre "rojo"enseño a rezar a su hija y nunca la hablo de politica y que por otro lado lloro cuando al llegar años después la democracia lloró al escuchar la Internacional por primera vez en tanto tiempo. Finalmente se jubilo en Talleres y murió rodeado de todos los que le quisimos el 26 de juni 1999 a los 85 años.
Yo lo adoraba, era un buen hombre que a su tosca manera nos queria por encima de todo. A mi me hablo de politica, de Marx y del socialismo idealizado. Me enseño que pese a lo cruel que habia sido la vida con él en ocasiones y lo mal que lo habia pasado durante muchos años de penuria y enfermedad (era asmatico como su padre y no tenia medicación cuando se ahogaba) se puede salir adelante y ser feliz.
Abuelo, siempre estarás en mi pensamiento.

El fragmento que aqui he escrito es parte del libro "Republica, Guerra Civil y Postguerra en Astillero-Guarnizo (1931-1947)