martes, julio 10, 2007

Ya huele a campamento
Ya queda muy poco para el campa. En unos días los monitores cojeran sus mochilas y subiran a montar con los padres. Los nervios de última hora se mezclan con las mil cosas que aun quedan sin hacer y otra vez, despues de años siento (aunque de una manera más relajada) la sensación de la prisa porque todo este en el momento justo y eso se lo debo a Inés que me "deja" acompañarla en sus tareas. Que gran honor para mi.
Me vienen mil recuerdos de los años pasados, cuando participaba de esa "voragine" activamente. Son recuerdos de reuniones, papeles, programaciones, menus, comisiones y de trabajo pero son recuerdos buenos de tiempos pasados. El olor del campamento por la mañana, los gritos en la zonas de baños, las comidas de monitores y el cigarro de la sobremesa.
Parece que han pasado mil años y aunque estuve el campamento pasado como monitora no era lo mismo. La cosas han cambiado, bueno, en realidad no han cambiado las cosas, ha cambiado las personas. Ya no eramos los de antes, aun quedaban algunos, pero no todos.
Me acuerdo de las noches preparando los raid de escultas después del dia de padres y del día de padres cuando eramos un poco más libres y podiamos relajarnos en el pueblo de turno al refresco de unas cañas.
No soy de las que cree que cualquier tiempo pasado fue mejor pero si distinto. En esencia es lo mismo, es la tradición que ha pasado de unos a otros. Lo que nos enseñaron los que nos precedieron es lo que hemos intentado enseñar a los que nos han venido detrás y no lo estan haciendo nada mal pero todo evoluciona y es la labor de todos evolucionar con los tiempos.
Durante los años que fuí monitora pase campamentos buenos y malos, la verdad es que apenas recuerdo los malos momentos pero se que los hubo y he de confesar, y supongo que todos los que compartisteis conmigo esos momentos, los mejores campamentos fueron nuestros años de escultas. Nos creiamos lo sufientemente mayores para ser autonomos pero aun no teniamos ninguna responsabilidad y los monitores que teniamos se esforzaban en que nos lo pasasemos lo mejor posible. Maravillosos recuerdos de aquellas noches en Saldaña, de las horas en la parcela en Castro y de las movidas que tuvimos en Bocos.
Otro año más estaré allí, no se cuanto tiempo porque el hacerse mayor conlleva otro tipo de responsabilidades, pero estaré y aunque solo fuese un día merecerá la pena compartirlo con vosotros

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola guapa, espero que todo salga bien cdo estemos arriba y nos lo pasemos de pm.
Gracias por aguantarme en mis momentos de estress.

Besitos